Tanto las filosofías del Antiguo Oriente hasta las más modernas técnicas de coaching se han preocupado por desentrañar las claves para mejorar la vida del ser humano. Una de esas claves, que responde a las leyes de la Naturaleza, se basa en la importancia del orden, y cómo se puede aplicar éste no sólo en el entorno en el que nos desenvolvemos y en los objetos materiales que nos rodean, sino también en lo sutil, para conseguir una personalidad más armónica.